El sistema de avisos de salida de carril, conocido como LDW, se encarga de monitorear la posición del vehículo en su carril y alerta al conductor en caso de que detecte que se está saliendo del carril sin haber utilizado el indicador de dirección previamente. Existen varios tipos de sensores utilizados para detectar las líneas que delimitan los carriles, siendo el más común la cámara de video montada detrás del parabrisas.
El sistema emite una señal acústica y visual en el panel de instrumentos para alertar al conductor en caso de que se esté saliendo del carril. Algunos sistemas incluso generan una pequeña vibración en el volante o en el asiento. Sin embargo, hay algunas situaciones en las que el LDW no funciona correctamente, como cuando la cámara no detecta las líneas del carril debida a la ausencia o el estado deficiente de la pintura.
El sistema se activa cuando el vehículo alcanza velocidades superiores a los 60 kilómetros por hora. Si el conductor desea cambiar de carril y no utiliza el indicador de dirección, el vehículo emitirá una señal lumínica y sonora para alertar de que se está abandonando del carril.
Este sistema es una herramienta valiosa para mejorar la seguridad en la carretera para los conductores y otros usuarios de la vía. La Dirección General de Tráfico (DGT), del Ministerio del Interior del Gobierno de España, recomienda su uso para evitar accidentes de tráfico.
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